Pobrecitas nosotras las mujeres, que vivimos pendientes de las fechas importantes, aniversarios, cumpleaños, y hasta del día en que el "fulanito" nos pasó aquella servilleta mojada para secar la punta del zapato donde cayó una de nuestras lágrimas que escapó como una doncella al verlo sonreír y pensábamos que Brad Pitt era la copia burda del maravilloso hombre con el que estamos saliendo. .
Pero qué fijación tenemos nostras las mujeres con esas fechas y el calendario que es solamente un pedazo de papel donde anotamos con sangre nuestros sinsabores!
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A veces confieso, quisiera ser más práctica y más objetiva como son los hombres, que no se complican la vida si olvidaron que su madre cumplió 70 años, pero ay del infeliz del marido que se olvide del cumpleaños de nuestra madre y no digamos del nuestro, porque entonces, nos volvemos unas trogloditas que pasamos restregándole el resto del año completo al "pobre olvidadizo" porque no podemos entender, cómo algo tan importante PARA NOSOTRAS, puede pasar por alto en su lista de prioridades!
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Es verdad, las mujeres solemos ser muy exageradas con las fechas, sobre todo si es nuestro aniversario y no nos dicen nada... y como un placer maquiavélico, somos incapaces (nosotras que sí nos acordamos) de decirle al fulanito..."feliz aniversario mi amor" porque lo que queremos en el fondo ES QUE LO OLVIDE para torturarlo con nuestras miradas mortales el resto de su existencia y hay que reconocerlo amigas, en realidad las mujeres somos medio lunáticas muchas veces.
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